Fecha: 2018-12-02 20:39:17


Crack en Wall Street: la señal que auguraría su llegada


El “Cruce de la Muerte” sería el golpe de gracia de las acciones.

Todos sabemos que los precios de las acciones se mueven en forma de serrucho. Lo podemos ver en cualquier gráfico que tengamos a mano. 

Administrando el tiempo y el espacio, las cotizaciones se trasladan rápida e impulsivamente hacia arriba o hacia abajo y marcan su tendencia en base a múltiples factores políticos, económicos y psicológicos. Estos movimientos son seguidos por débiles correcciones de precios que consolidan el sentido de la tendencia.

En los mercados generalmente cuando a una acción le cuesta subir, con el paso el tiempo termina bajando, y viceversa. Si una acción en tendencia alcista sube tibiamente, lateraliza y pasan los días, probablemente suceda que muchos de los inversores que la posean en sus carteras se resignen a obtener mayores ganancias y quieran desprenderse de ella. Otros inversores pueden tomar nota de esto y también quieran vender las acciones por temor a ver licuados sus resultados. De esta manera se gesta una ola de ventas que termina tirando abajo el precio de la acción.

Durante todo este año sufrimos los vaivenes de las acciones en el mundo. Las trayectorias de los índices norteamericanos de 2018 son dignas imitaciones de las montañas rusas que podemos encontrar en los parques de diversiones de Disney. 

Después de un arranque de año a pura euforia, el índice S&P 500 tropezó a fines de enero y principios de febrero. Luego, ensayó una importante recuperación de un mes y medio pero volvió a trastabillar a mediados de marzo. Entre abril y septiembre tuvo sus mejores seis meses del año. Pero finalmente cayó con fuerza en octubre y consolidó este movimiento bajista en noviembre. 

La guerra comercial entre Estados Unidos y China y la política de tasas de la Reserva Federal, que aspiró dólares de todo el mundo, fueron los culpables de la volatilidad de las acciones.

El gráfico que está abajo te muestra los altibajos de las acciones norteamericanas durante 2018.



Podés ver los valores en los que el índice S&P 500 cerró cada jornada, unidos por una línea negra y resaltados por el área celeste. 

También podés apreciar en el gráfico que hay dos líneas, una roja y otra azul, a las que te sugiero que les prestes suma atención. 

Ambas son medias móviles. Cada punto de la línea roja representa un promedio de los valores de cierre del S&P 500 de las últimas 200 ruedas. De la misma forma, la línea azul está constituida por los promedios del índice de las últimas 50 jornadas. Tanto la media móvil de 50 como la de 200 ruedas nos indican la fuerza y el sentido de las tendencias de mediano y largo plazo, respectivamente

Mientras más empinadas sean las pendientes de las medias móviles, mayor será la fuerza de la tendencia. Estamos viendo que la media móvil de 200 ruedas dejó de tener una pendiente ascendente para aplanar su trayectoria. Esto quiere decir que desde hace tiempo le está costando subir al S&P y la tendencia alcista de largo plazo está perdiendo vigor. 

Al mismo tiempo, la media móvil de 50 ruedas muestra una pendiente decididamente bajista. La tendencia de mediano plazo de las acciones viene siendo ir hacia abajo. 

En unos días la media móvil de 50 ruedas se encontrará con la de 200. Cuando la línea azul atraviese de arriba hacia abajo la línea roja, se producirá lo que en Análisis Técnico se conoce como El Cruce de la Muerte.

Generalmente cuando esto pasa, si repentinamente no hay una rápida recuperación de los precios, las acciones se caen en picada

Fijate lo que pasó con los precios de los ADR de Grupo Financiero Galicia y Tenaris, después del cruce de la muerte.





Tremendas caídas, ¿no?

El S&P 500 no está en una situación terminal pero, como dirían los médicos, su “estado es delicado”. De no mediar una fuerte y rápida recuperación en las próximas jornadas, se produciría una caída en cascada de las acciones.

La Reserva Federal parece haberse dado cuenta de esto. El miércoles el presidente de la Fed, Jerome Powell, declaró que las tasas en Estados Unidos están cercanas a sus niveles normales, en contraste a lo que dijo hace unos meses, cuando se refirió a que todavía faltaba mucho terreno para llegar a esos niveles. 

De esta manera, Jay Powell buscó transmitir que la política de tasas será menos agresiva en el futuro para inducir un rally de las acciones.

Seguramente Donald Trump también se haya percatado de la debilidad de las acciones norteamericanas. No me sorprendería que el sábado, después de que cene con su par chino Xi Jinping, anuncie una tregua en la Guerra Comercial, lo que nuevamente impulsaría las acciones al alza.

Fuente: Contraeconomía