Fecha: 2023-04-10 05:57:55


"Un problema son los tiempos de aprobación de los informes de impacto ambiental"


Entrevista a Carlos Ramos, presidente de la Cámara de la Minería de Salta

Más allá del crecimiento que tuvo la minería en la Puna salteña en los últimos años, todavía hay varios puntos por mejorar para que deje de ser una actividad incipiente y se consolide como una verdadera oportunidad de desarrollo para la provincia. En diálogo con El Tribuno, el presidente de la Cámara de la Minería de Salta, Carlos Ramos, marcó dos de esas situaciones que deben solucionarse. Una es el precario estado de los caminos que llevan hacia los yacimientos y la otra, que es la más preocupante según el dirigente empresarial, es la demora en las aprobaciones de los informes de impacto ambiental que requieren los proyectos mineros para avanzar.

El año pasado Salta fue la provincia que más novedades aportó al sector minero con el inicio de construcción de tres minas de litio y el avance de las exploraciones en otros proyectos ¿Sigue esa inercia ya pasado el primer trimestre de 2023?

La política salteña es proclive a la minería. Esto, cómo presidente de la Cámara de la Minería, siempre lo quiero destacar: el gobernador, la secretaria de Minería (Romina Sassarini) son proclives a solucionar los problemas y siempre están impulsando la inversión minera. Pero hoy tenemos algunos problemas graves que tenemos que tomarlos y tratar de ir hacia adelante. Uno de ellos es el estado de los caminos. Esto es público, es conocido, es decir la infraestructura vial es muy problemática. Y otro problema muy complicado, muy grave hoy, que en este momento tenemos son los tiempos de aprobación de los informes de impacto ambiental. Los informes de impacto ambiental, tanto de prospecciones, exploración como de explotación están muy demorados, ya tenemos que hablar que estamos llegando a años para la aprobación de un informe. Esto es malo para los que están y para los que vienen. Ese es el punto. Esto lo tenemos que solucionar. Nosotros lo hemos planteado, lo hemos charlado con el Gobierno y les han dado más personal técnico a la Secretaría, eso se ve. Pero esto todavía no se traduce en las necesidades. Estamos hablando de una minería que hace siete u ocho años no tenía minas en explotación prácticamente y hoy tenemos a un Lindero exportando oro; tenemos tres proyectos de litio, por lo menos, en construcción, que el año que viene ya anunciaron que empiezan a producir y exportar.

¿En qué consiste un informe de impacto ambiental?

El informe de impacto ambiental es el requisito básico para hacer minería. La minería tiene las etapas de prospección, exploración y explotación. Empezamos a investigar una zona, luego hacemos trabajos más formales en esa zona, como perforar, y después viene la construcción de una mina, la explotación y exportación. Todo eso se tiene que volcar en un informe de impacto ambiental. Y tiene que haber una DIA (Declaración de Impacto Ambiental), una declaración de aprobación de ese informe de impacto ambiental por el Estado. Es un documento oficial en el cual se recoge el resultado de una evaluación de impacto ambiental y sus alegaciones. Y no se puede mover nada si no es con esa aprobación. Y está bien, nosotros coincidimos con eso.

Pero están demorados en los tiempos…

Ese es el problema, los tiempos están demorados. Ya estamos hablando de años de demora del informe, tanto de exploración y de construcción y explotación. Entonces al estar tan demorados empezamos a tener problemas negociales. Es decir, a lo mejor una minera que podría venir, no va a venir. Si hoy yo le digo a una minera que quiere venir y me pregunta cuánto tiempo me va a llevar obtener este informe y yo le digo un año, año y medio o dos años, me va a decir que no viene.

A su parecer, ¿en dónde está la dificultad, la traba?

Como le decía, se le ha dado más apoyo a la Secretaría, se le ha dado más personal, pero no es suficiente. La tarea es compleja. Creo que el Gobierno va a tener que sumar más personal, tenemos que buscar soluciones. Nosotros queremos aportar lo que nos piden, en lo que podamos colaborar, pero tenemos que, entre todos, buscar un camino porque las consecuencias son graves. Insisto, sé de que hay empresas que han abandonado contratos porque no les aprobaban los informes de impacto ambiental.

Parece un contrasentido ante la oportunidad que existe por la demanda de minerales críticos para la transición energética mundial, como el litio y el cobre, de los que Salta tiene mucho para aportar.

Creo que tenemos que movernos rápido. Por ejemplo, un Taca Taca, el proyecto que yo represento, en el que tenemos algunos problemas nacionales, a nivel económico, como los temas cambiarios, el IVA a la construcción, temas de política económica, pero si tuviéramos el informe de impacto ambiental aprobado, el empuje que viene de parte de la empresa y de los accionistas es otro. No hay duda. El hecho de tener un informe de impacto ambiental de explotación aprobado es como tener el permiso de la sociedad, no solo del Estado. Porque no nos olvidemos, que en estos informes se consulta a las comunidades originarias, a la comunidad en general, es una consulta libre, previa e informada. Hay una serie de consultas y participaciones comunitarias que nos dice que se está de acuerdo con el proyecto.

Otro punto que mencionó es el tema de la infraestructura, sobre todo vial ¿Cómo afecta la precariedad que existe en los caminos?

La infraestructura vial es importante. Hablamos de la seguridad de la gente, es hablar de algo muy importante y muy grave, por eso no solo mencionamos los informes de impacto ambiental. Esto es fundamental para el avance de la minería en general, la infraestructura vial la necesitamos.

Recordemos que la mina de cobre Taca Taca, si se llega a construir, va ser una de las minas más importantes de Sudamérica…

Es una mina de clase mundial, con una inversión de 3.600 millones de dólares para la construcción. En el litio, por ejemplo, se habla de inversiones de 500 o 600 millones de dólares para la construcción, con una planta de personal de 300 personas. Con Taca Taca vamos hablar, en el momento de estabilidad, de 2.700 personas y en la construcción tendremos 5.000 o 6.000. Es otro tipo de proyecto. Lindero por ejemplo, está exportando unos 200 o 230 millones de dólares, y es muy probable que Taca Taca esté exportando unos 2.000 millones de dólares anuales.

Surgió la iniciativa en la Mesa del Litio de buscar aumentar las regalías provinciales a la producción de litio, a la par del crecimiento exponencial que registra el precio internacional de este mineral. ¿Cuál es la postura de la Cámara con respecto a eso?

Todo cambio en la estructura impositiva no es conveniente. Vayamos a algunos datos: Chile exportó en 2021 unos 58 mil millones de dólares; Perú en el mismo año, unos 39 mil millones de dólares y Argentina, 3.300 millones de dólares. Eso no es casualidad. Hay estudios que marcan que la carga impositiva de una mina es más del 50% en Argentina, uno poco más del 40% en Perú y menos del 40% en Chile. Y estas son las razones por las que hay más desarrollo minero en ciertos lugares. Entonces, a estas cosas la tenemos que considerar. No estoy de acuerdo con los aumentos de la carga tributaria, ni con los cambios en las reglas de juego en medio del partido. Eso no es bueno. Y, por último, si suben el precio del mineral aumentan la regalía, pero si baja el precio del mineral, no se menciona nada al respecto.

Fuente: Diario El Tribuno